Su maestría para tocar el violín y la cuidadosa selección musical de su catálogo de grabación le han permitido difundir piezas no tan conocidas del periodo romántico al contemporáneo. Su formación comenzó en Japón y, tras realizar un posgrado en la Universidad de Yale, se vinculó a la New World Symphony de Miami, bajo la conducción de Michael Tilson Thomas. La exquisita delicadeza de sus grabaciones, usando un violín Stradivarius de 1736 al que llama Lucy, conmueve a quien las escucha, ya sea en repertorio de música culta o en bandas sonoras para los estudios cinematográficos Ghibli.