Tras el excelente 1600, Concerto Italiano salta un siglo en un programa de música para cuerda que celebra la extraordinaria creatividad de los compositores italianos del siglo XVIII. Las obras de 1700 aparecen en arreglos para grupo de cuatro instrumentos sin solista y, una vez más, revelan la elegancia del conjunto de Rinaldo Alessandrini, que dirige desde el clave. Junto a compositores tan conocidos como Vivaldi, Geminiani y Locatelli, encontramos las personalidades singulares de Durante, Mascitti, Galuppi y Pugnani. Todas las piezas son exquisitos ejemplos de música de cámara y, en el caso de las menos frecuentes en el repertorio, descubrimientos de una época inagotable.