

LANDSCAPES, KNIVES & GLUE – Radiohead's Kid A Recycled
El rock inteligente de Radiohead ha capturado la imaginación de todo tipo de músicos, desde el pianista Christopher O’Riley a la leyenda del jazz Brad Mehldau. En LANDSCAPES, KNIVES & GLUE – Radiohead’s Kid A Recycled, el quinteto de cuerda Wooden Elephant, normalmente dedicado a la música clásica contemporánea, explora el álbum de los británicos estrenado en el 2000, después de sus particulares versiones de Lemonade de Beyoncé y Homogenic de Björk, entre otros. El resultado es una interpretación de imaginación desbordante, un triunfo musical en el que los músicos se sirven de objetos cotidianos, juguetes y peculiares técnicas instrumentales para recrear la compleja mezcla de sintetizadores, guitarras eléctricas, efectos digitales y, por supuesto, la voz de Thom Yorke. “En Kid A hay sonidos que queríamos reproducir, pero no sabíamos cómo”, dice el violista y arreglista Ian Anderson. “Encontrar la manera de lograrlo se convirtió en una obsesión. Terminé mirando cada objeto que encontraba para ver si podía servir”. Junto a los violines, la viola, el violonchelo y el contrabajo, Wooden Elephant, que reúne a músicos de Irlanda, Escocia, Bulgaria, Noruega e Islandia, utilizó arpas de boca, flexatonos, matasuegras, copas de vino, espumadores de leche, campanillas de juguete, la cadena de un tapón de tina, un taladro y otros muchos instrumentos insólitos. Cada uno de ellos recrea algún aspecto del universo sonoro de Radiohead. “Como músicos clásicos, nunca llegamos a tocar este repertorio, aunque nos parece que es de lo mejor que se haya compuesto jamás”, dice la violinista Aoife Ní Bhriain. “Necesitábamos que nuestra forma de interpretarlo fuera tan interesante que el público quisiera escucharnos a nosotros en lugar del original”, concluye Anderson. Aquí, los dos nos llevan por la música de un álbum fascinante. Everything in Its Right Place Ian Anderson: “Empieza con unos clústeres tonales que dan paso a los tres acordes del riff de bajo. Queríamos que sonase a música clásica contemporánea desde el principio, y no a una simple versión. Lo que ocurre, claro, es que los sonidos del pop y el rock alternativos vienen de técnicas clásicas contemporáneas”. Aoife Ní Bhriain: “Es bastante fiel al original, pero lo pensamos como una introducción del álbum. No queríamos llenarla de instrumentos raros”. Kid A Anderson: “Le dimos unas cuantas vueltas a la estructura. Duplicamos algunas secciones y otras las cambiamos de orden. También usamos una técnica que robamos del compositor del siglo XVII Heinrich Biber. Si pones un trozo de papel entre las cuerdas de un contrabajo y lo tocas con arco, suena como un tambor”. The National Anthem Anderson: “Aquí exploramos otro tipo de distorsión con cadenas de tapón de tina. Algunos bateristas de jazz las ponen sobre los platillos para crear el efecto de un zumbido y lo que hicimos fue adaptar la idea a nuestros instrumentos. Uno de los mayores desafíos que encontramos es que en el original la música nunca deja de crecer. Cuando crees que ha llegado al límite, crece todavía más. En nuestra versión, cuando llega el clímax y estamos tocando tan alto como podemos, sacamos los matasuegras y los hacemos sonar todos a la vez”. How to Disappear Completely Ní Bhriain: “En esta toco un si bemol en una copa de vino un par de minutos, hasta que llega una especie de movimiento ondulante maravilloso. Después toco un espumador de leche con papel higiénico atado a su alrededor. Es un poco pesado porque tengo que mojar el papel y después dejarlo secar, pero el sonido es fantástico”. Anderson: “Al principio se escucha mucho lo que llamamos la ‘técnica de las gaviotas’, que son glissandos largos y rápidos en la parte alta de las cuerdas. Es una de nuestras especialidades”. Treefingers Anderson: “Esta es la pieza de la que estoy más orgulloso y una de mis favoritas. El sonido del original es muy ambiental, casi como un sintetizador. Para crearlo, utilizamos EBows (arcos electrónicos), que crean campos electromagnéticos para producir un efecto sostenido en la guitarra y simular el sonido de las cuerdas de acero”. Optimistic Anderson: “Esta es una de las transcripciones más literales y es la primera vez que utilizamos una baqueta de timbal con el contrabajo, que es lo que le da ese ritmo de percusión. Es otra forma de crear efectos de tambor con instrumentos de cuerda. En la sección intermedia, la cascada de sobretonos viene del hilo de acero con el que envolví el arco”. In Limbo Anderson: “Hicimos arcos con forma de percha usando unos de juguete. Pensamos en comprar unos, pero costaban miles de libras cada uno, y estos puedes fabricarlos por unas 25. En la sección central, hay un cambio de ritmo. Cuando ensayamos para darle forma al tema, Nikolai, nuestro contrabajista, estaba obsesionado con una parte de ‘400 Years’ de Bob Marley, y empezó a tocar el riff sin que nadie lo esperara. Al final decidimos incorporarlo”. Idioteque Anderson: “Una de las dificultades de llevar las canciones pop a instrumentos clásicos es que, si eliminas la voz y la letra, la línea melódica que queda no es demasiado interesante. Nuestro problema era cómo hacerlo atractivo. En ‘Idioteque’, Aoife saca otra vez el espumador de leche, aunque esta vez con gomas elásticas atadas en su extremo para crear un sonido inquieto y ansioso. Al final usó un taladro eléctrico con bandas elásticas en la punta para tocar los acordes contra las cuerdas”. Morning Bell Anderson: “Esta fue una de las canciones con las que nos tomamos más libertades. En el álbum de Radiohead, el mayor clímax llega con el final de ‘Idioteque’ y queríamos que todo lo demás fuera una coda. Para extender la coda a lo largo de las piezas, bajamos el ritmo de ‘Morning Bell’, que adquirió una atmósfera más amenazante y oscura”. Motion Picture Soundtrack Ní Bhriain: “‘Motion Picture Soundtrack’ es como el sol que sale en mitad de un día oscuro y tormentoso. Al principio tocamos unas armónicas desafinadas. Pusimos trozos de papel para intentar mantenerlas afinadas, pero se escuchan un montón de imperfecciones en nuestra forma de tocar”. Anderson: “La canción original tiene un órgano de pedales y se escucha el ruido del mecanismo. Claramente, no está en las mejores condiciones, pero las imperfecciones hacen el sonido aún más bello. Justo antes del final, Hulda Jónsdóttir (violinista) aprieta la parte inferior del violín con el arco para crear un sonido similar al chirrido de un barco. Al final de ‘Motion Picture Soundtrack’ suenan un montón de arpas y lo que hicimos fue trasladar ese sonido a una caja de música. Me parece precioso”.
4 de junio de 2021 10 piezas, 59 minutos ℗ 2020 BACKLASH Music
SELLO DISCOGRÁFICO
BACKLASH MusicWooden Elephant
Quinteto de cuerda
Edward O'Brien
Composición
Producción
- Johann GüntherProducción
- Johann GüntherIngeniería de mezcla, Ingeniería de masterización, Ingeniería de edición, Ingeniería de grabación
- Mads HaidugaAsistente de ingeniería