Si Bach puede ser interpretado en un piano moderno, ¿por qué no en la música para teclado que surgió en Inglaterra y Holanda durante los siglos XVI y XVII? Las gallardas, fantasías, pavanas y preludios de Byrd, Gibbons, Bull, Sweelinck y otras personalidades de la época fueron creadas para el órgano, virginal y clavecín. Este fascinante álbum demuestra que las mismas composiciones pueden beneficiarse con la habilidad del piano para subrayar melodías, agregar claridad en las texturas y potenciar las posibilidades expresivas de la partitura. Mishka Rushdie Momen se lo explica a Apple Music Classical: “Tengo una gran apreciación por la resonancia del piano, su amplia gama de sonidos y habilidad para evocar la voz humana. De alguna manera, esto corresponde con la tradición vocal de la que surgieron estas piezas”.
Reformation, título que refleja el tumultuoso periodo religioso en la Inglaterra del siglo XVI a la que pertenece esta música, marca un momento importante para el género de interpretaciones de época. El fraseo de Mishka Rushdie Momen destila un amor profundo y claro entendimiento de la articulación y los adornos estilísticos de ese momento que aquí fusiona con una sensibilidad moderna, precisión técnica e instinto expresivo acoplado al espíritu de las piezas. “Traté de respetar su naturaleza emocional”, explica la pianista. “En las danzas de carácter más íntimo, usé el pedal suave y traté de que la paleta de colores fuera siempre delicada”.
Rushdie Momen se adentra en el laberinto introspectivo de Fantazia of Foure Parts de Gibbons con una compostura admirable que le da un majestuoso arco dramático. “Esta es probablemente mi obra favorita de Gibbons”, afirma. “La manera en que se entrelaza el contrapunto es extraordinaria y, de alguna forma, es una melodía que se adentra en su propio mundo interno. Es tan hermosa pues se despliega como si te tomara de la mano y te guiara a través de sus espacios”.
El álbum comienza con cuatro obras de William Byrd, uno de los grandes maestros de la música coral junto a Tallis y Gibbons. Para Rushdie Momen, “Byrd es el padre espiritual de los cuatro compositores que se presentan en el disco” y destaca Pavana Lachrymae, su adaptación de la canción popular “Flow My Tears” de John Dowland. “Byrd capta el lirismo en el tema de Dowland, pero al mismo tiempo, muestra por qué el teclado es tan mágico debido a su habilidad para hacer una figuración maravillosa y combinarla con armonías de gran belleza. Es la introducción perfecta para quienes no conozcan este repertorio”.
Si se trata de su energía virtuosa y vibrante, John Bull es incomparable. Rushdie Momen dice que sus variaciones sobre la balada Walsingham, mencionada en el Hamlet de Shakespeare, “son exuberantes y demuestran el virtuosismo de Bull. Mucha gente se olvida de esa cualidad presente en la música renacentista para el teclado. Como nos concentramos tanto en las obras corales de esa época, tal vez algunas personas no saben que esta música puede ser extrovertida y emocionante”.
Escondida entre las joyas del repertorio inglés, una obra del compositor holandés Sweelinck representa el nexo entre las inquietudes musicales de Inglaterra y Holanda en esa época. Construida enteramente sobre las escalas ascendientes y descendientes de seis notas, Ut, re, mi, fa, sol, la a 4 voci es una creación típica de la artesanía exquisita de Sweelinck. “Cuando estaba en la universidad, sentía envidia viendo a mis colegas que ensayaban las obras de Sweelinck”, afirma Rushdie Momen. “No se me ocurrió que esa música también estaba disponible para mí”.
Indudablemente, Reformation marca el comienzo de las aventuras de Rushdie Momen en la música renacentista de Inglaterra, un universo relativamente desconocido para el público moderno. La pianista tiene una teoría al respecto: “Tal vez la gente siente que como estos compositores vivieron en una época tan inestable y problemática, su música debe reflejar esa misma turbulencia. Sin embargo, estas piezas son alegres, exuberantes y trascendentales. Es importante mostrar una perspectiva diferente”.