Bruch & Korngold

El Concierto para Violín (Violin Concerto in D Major) de Erich Wolfgang Korngold pertenece a un momento de creatividad excepcional en su vida. Luego de prometer escribir únicamente bandas sonoras hasta la derrota del régimen de Hitler, Korngold se dedicó de cuerpo y alma a componer para las salas de conciertos al final de la Segunda Guerra Mundial. La afinidad profunda de la violinista coreana Kim Bomsori por la música del compositor austríaco, así como la encantadora sensibilidad lírica y calidez de su interpretación, son la base ideal para la poderosa ejecución de este concierto escrito en la posguerra. Con el apoyo impecable de la Orquesta Sinfónica de Bamberg y el director checo Jakub Hrůša, Bomsori inunda la pieza de una honestidad emocional irresistible. También lo logra en un exquisito arreglo del aria “Glück, das mir verblieb”, de la ópera Die tote Stadt de Korngold. Bomsori es una romántica, como deja en evidencia su aproximación abierta y emotiva del tema atemporal Violin Concerto No. 1 Max Bruch. Su ejecución, llena de estilo y color, está a la par de sus mejores interpretaciones de Korngold.