- SELECCIÓN EDITORIAL
- 2017 · 4 piezas · 41 min
Sinfonía n.º 2 en re mayor
Op. 73
Brahms se esforzó durante más de 20 años para completar su Sinfonía n.º 1, la primera de muchas. El hecho de que escribiera su sucesora en cuestión de meses sólo puede sugerir que el compositor debía sentir un gran alivio. Su Sinfonía n.º 2, compuesta en 1877 y estrenada con éxito en Viena a finales de ese año, muestra a Brahms en un estado de ánimo relativamente tranquilo. Es cierto que los ominosos acordes de trombón cerca de la apertura y la vehemente acumulación de energía en la sección central del primer movimiento nos recuerdan que hay sombras más oscuras bajo la superficie, pero en general la música de esta sinfonía refleja una disposición soleada y pastoral. Un patrón de tres notas en violonchelos y contrabajos, seguido de una suave melodía en los cuernos al comienzo de la obra, genera gran parte del material temático del extenso primer movimiento. Otro rasgo distintivo es la segunda idea, maravillosamente lírica, ricamente instrumentada para violas y violonchelos, cuya línea melódica recuerda a su famosa “Canción de cuna”. El siguiente movimiento “Adagio non troppo” se abre con una melodía apasionada en los violonchelos que alcanza un clímax poderoso cerca del final. Sin embargo, los relajantes ritmos de baile del tercer movimiento restablecen el equilibrio, y el final lleva la obra a un cierre triunfante y optimista.