Fazıl Say

Al estilo de Glenn Gould, el compositor y pianista turco Fazıl Say deja un sello personal en toda la música que interpreta, y como su legendario antecesor, a menudo tararea durante los recitales. Say se encuentra igual de cómodo con las vibrantes sonatas de Mozart que grabó en 2016 que con las de Beethoven, cuyos tempo y dinámica reinterpretó en sus versiones de 2020. El espíritu libre de sus lecturas tiene su origen en las lecciones de su maestro, el compatriota Mithat Fenmen, que lo animaba a improvisar día tras día. Fazıl Say estudió composición con İlhan Baran (alumno del francés Henri Dutilleux) y, años después, David Levine le ayudó a desarrollar un estilo subjetivo y ecléctico. En su repertorio caben Bach y Chopin, pero también Debussy y la vanguardia, además de la música de cámara y el jazz. El mismo crisol de influencias domina sus composiciones. Los matices de Bartók y Stravinski recorren Gezi Park (2013-2014), una reflexión en tres partes sobre el levantamiento popular en el parque Gezi de Estambul en la primavera de 2013, mientras que las técnicas de piano preparado de John Cage y los ecos del folclore turco asoman en la sugerente pieza para piano solo Black Earth (1997).